Se trata de un adolescente de 17 años a quien le fue extraído un riñón exactamente hace un año para poder comprar un Iphone y un Ipad y que ahora está gravemente afectado por una deficiencia renal.
Los acusados de haber efectuado la cirugía recibieron alrededor de 35 mil dólares de los cuales sólo le correspondieron 3.500 al joven, quien los usó para comprar los artículos de Apple.
El adolescente era de Anhui, una de las provincias más pobres de China, por lo que su madre se sorprendió al ver que el joven había comprado estos artefactos y él tuvo que confesar que había vendido su riñón para adquirirlos.
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