Call of Duty es un juego violento, pero no un simulador.
Los videojuegos vuelven a estar en el ojo del huracán, después de que Anders Behring Breivilk, el asesino de Oslo, dijo que se la pasaba jugando World of Warcraft y que entrenó para cometer su masacre jugando Call of Duty: Modern Warfare 2. ¿No es hora de aclarar el papel de los videojuegos violentos en la sociedad?
Según un artículo publicado en Forbes Games, es una estupidez culpar a los videojuegos por lo sucedido en Noruega. “Se dice que Call of Duty tuvo un papel significativo en los asesinatos (…) pero probablemente hay 10 millones de personas que juegan que no mataron a nadie” dice Paul Tassi, autor del artículo.
Hay varios estudios que prueban exactamente lo opuesto, que los jugadores son más calmados a la hora de manejar situación de alto estrés. En el 2010, el Dr. Christopher Ferguson, de la Universidad de Texas A&M publicó un estudio que mostró que los juegos no tenían ningún impacto en la agresividad de los participantes. Por otro lado, Forbes pone en la mesa una interesante hipótesis: a medida que las ventas de los juegos sube, los crímenes violentos han bajado en Estados Unidos.
Para los estadísticos, es claro que no necesariamente hay una relación de causación, sino simplemente una correlación. Pero el artículo si abre la posibilidad que los videojuegos tienen un papel positivo a la hora del combate contra el crimen. A fin de cuentas, los videojuegos son una forma de entretenimiento barata y segura.
Entonces, ¿por qué los medios siguen buscando una razón en los juegos de video? The Economist, una de las publicaciones más serías en el mundo, dice qué “la oposición a los videojuegos nace de la neofobía que tienen que ha enfrentado a los viejos contra los jóvenes. La mayoría de ‘gamers’ tienen menos de 40 años, mientras que la mayoría de críticos tiene más de 40 años”.
Los nuevos medios siempre van a generar repercusiones negativas. Pasó lo mismo con el rock y la literatura en sus respectivas épocas cuando irrumpieron en la sociedad. A medida que haya un cambio de generación en la opinión de los medios, que se debería dar con mayor velocidad con el fenómeno de los blogs y la libertad que brinda Internet, los ataques contra los videojuegos deberían bajar.
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